Entrevista a 84 en: http://www.musicaen1000direcciones.com/
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Entrevista a 84 en: http://www.musicaen1000direcciones.com/
84: "La clave de un grupo está en los segundos y terceros discos"
La cita es en el Massai Café de Collado Villalba (Madrid), a eso de las siete de la tarde, horas antes de su concierto en la misma sala. Allí está Álex, su responsable de comunicación, esperando al grupo que llega con un breve retraso. Les espera una buena noticia: se van a Chile dentro de un especial benéfico que se organiza con motivo del terremoto. El motivo no es halagueño, pero para ellos es una oportunidad y chocan la mano, también conmigo, aunque hace veinte segundos que me acabo de presentar. "¿A qué hora es el concierto?", pregunta Jaime. Es a las 23 h. "Hostia, y ¿qué hacemos hasta entonces? Vamos a pillarnos una buena moña...".
Anécdotas aparte, nos llama la atención 84. No tienen disco físico. Su colección de canciones sólo está disponible en la red y de ellas podemos decir que son una buena muestra de lo que pueden llegar a ser en unos años. Tienen actitud y referencias evidentes por las que pueden ser metidos en "el saco de...", pero también un buen directo que ofrecer y una propuesta aparentemente sincera. Aquí lo mejor de la charla que tuvimos con ellos antes de su prueba de sonido.
Desde que terminárais 'El burdel de las sirenas' ha pasado bastante tiempo, ¿lo seguís viendo de la misma forma ahora?
(Jaime) En realidad, es raro. En diciembre de 2008 salió un mini EP de tres canciones y el disco lo dejamos para principios de junio de 2009. En verdad, tiene poco más de medio año, pero estos doce meses han sido increíbles. Para ser un primer disco, nos han ido muy bien las cosas: ha tenido un buen recibimiento y se está conociendo más ahora, pasado el tiempo. Normalmente, en cualquier compañía sacas un disco, te promocionan el primer single y como no vaya bien: ¡hasta luego, Javier! Vamos ya por el tercer sencillo y estamos encantados, hay que seguir aprovechándolo.
¿Y la calidad del disco? Las canciones llevan compuestas desde hace más de tres años.
(Beris) Incluso hay alguna de antes. Hay muchas canciones que las hicimos siendo más adolescentes, con más inocencia y tienen una frescura especial. Con el sonido, tuvimos mucha suerte al dar con Josu García, Fernando Polaino y Alejo Stivel, que han respetado la idea que teníamos de respetar el formato acústico, que se viesen muy claras las voces, las canciones. Viendo este primer disco, tenemos más claro por donde queremos ir con 84.
(Jaime) Si grabásemos ahora nuestro segundo disco, tendría muchas diferencias con el primero.
¿Tenéis mucho material acumulado?
(Jaime) Sí.
(Beris) Demasiado, excesivo... (risas). Tenemos entre cuarenta y cincuenta canciones.
(Mon) Es que grabamos el disco en 2007 y, hasta que firmamos con el Sello Movistar, los que nos dieron la oportunidad, pasó mucho tiempo... un par de años. En esos dos años, aparte de tocar mucho por Madrid, nos dedicamos a componer como animales. Si a esto le añades este año y medio de viajes y experiencias, nos hemos visto con un montón de canciones que ya veremos que hacemos con ellas. Si alguien quiere alguna, que nos llame y se la vendemos (risas).
¿Haces algún tema de los inéditos en vuestros conciertos actuales?
(Beris) Hay alguno, pero lo que tenemos más o menos cuadrado, lo más nuevo nos lo guardamos. Cuando salió el primer disco, lo que pasó es que para la gente que nos seguía no supuso ninguna novedad, porque ya se sabían todos los temas.
(Jaime) Incluso para nosotros. No es lo mismo sacar un disco de temas que llevas tocando cuatro años, a canciones que aún no han visto la luz en directo. Las estás empezando a tocar, las ves de otra manera.
(Mon) También es una cuestión de completar el repertorio. Si haces un bolo conjunto, no hay problema, pero, si el concierto es sólo tuyo, no puedes ofrecer sólo 40 minutos de bolo. Si vamos en acústico, hacemos lo que nos apetece... ahí no dependes de ellos, ni de un ensayo previo.
¿De donde viene el interés por el concepto acústico?
Viene de siempre. Empezamos así, éramos tres colegas que se reunían a tocar canciones con su acústica. Nos llamaban de un bar e íbamos los tres, cada uno con su guitarra. Luego le dimos forma al tema armonías basándonos en música que nos gustaba mucho y en grupos de los sesenta, setenta: Crosby Still and Nash, por ejemplo.
Tenéis una lista de artistas con los que habéis compartido cartel muy dispar. ¿La filosofía es tocar donde se pueda? ¿Y no hay más?
(Jaime) Exactamente. En el momento en el que estamos, o aprovechas las oportunidades o estás perdido. No puedes ir de auténtico en el momento en el que estamos. "No, no, yo no voy a tocar con no se quién"..., eso no lo puedes hacer.
Totalmente de acuerdo, pero ¿reconoces que hay grupos con los que tenéis muy poco que ver?
(Beris) ¿Sabes lo que pasa? Que, a veces, te invitan a tocar con alguien, que, a priori, te da repelús, un poco de grima (risas). Pero luego, cuando estás con ese artista de gira, te das cuenta de que también tiene su historia. Te ayuda a descubrir un directo suyo por dentro, lo estás compartiendo con él.
Ponme un ejemplo.
(Jaime) Estás buscando polémica (risas).
(Beris) No, te lo digo sin ningún problema. Tocamos con Amaia Montero, que, a priori, no era lo que más nos motivaba... pero tenía una banda cojonuda. Tocaba Javi Pereira, Charlie, batería de Quique González, e Iván Ferreiro.
(Mon) Eran musicazos. Entre América y España estuvimos dos o tres meses con ellos yendo y viniendo a todos lados. Sí, tú ves un video de Amaia Montero y el target es evidentemente distinto. Soy el primero que no me compraría un disco de ella, pero ves un directo suyo y las cosas cambian.
(Jaime) Además te das cuenta de por qué están donde está, porque es una currante. Nosotros nos levantamos un día en un hotel de no se qué ciudad, tranquilamente, mientras que Amaia Montero llevaba desde las ocho de la mañana haciendo entrevistas en las teles y radios de todos lados, sin parar.
Supongo que, si tuviérais la oportunidad de hacerlo vosotros, también lo hubierais hecho.
(Beris) Por supuesto, pero por lo que nos cuentan, hay muchos artistas que ya no lo hacen. Gente que ha llegado a un punto en el que se lo pueden tomar de otra manera y elegir qué hacer. También podemos decir que hemos tocado con gente espectacular que jamás imaginamos.
(Mon) La gira de seis ciudades con Pereza fue muy buena. Nos quedamos con la misma sensación que te decía antes. Son unos profesionales. Hemos grabado un tema con Los Secretos también.
(Beris) En el fondo, hemos elegido por donde ir en cada momento. Cuando empiezas, la gente te intenta colocar, etiquetarte para quedarse un poco tranquilo, lo hacemos todos, sobre todo para saber el palo del que vas. Y nuestro palo es tocar en directo, no nos gusta hacer playback. Hemos pedido una colaboración y, en vez de pedirla con el cantante de turno de serie famosa, nos la hemos currado por nuestra cuenta pidiéndosela a Ramón Arroyo para saber si les parecía bien. Sí, aceptas cosas que en principio no te hacen mucha gracia, pero la decisión la tomas tú y tú mismo te vas colocando donde de verdad quieres.
¿Cómo vino lo de Ramón Arroyo?
(Mon) Tenemos muchos amigos en común, Ramón ha venido a algunos conciertos nuestros, le gusta la banda. El es amante de los grupos que hacíamos referencia antes. Un día nos grabamos Esperando una señal y vimos que tenía un rollo súper Secretos. Se lo propusimos sin ningún compromiso y aceptó de inmediato.
(Beris) Y tocamos con ellos en el Palacio de deportes con tres guitarras acústicas. No te imaginas el silencio que había, era espectacular (risas).
¿Qué tal la experiencia en lugares como Perú o Ecuador?
(Jaime) Espectacular, es que el público no tiene nada que ver con el español, es otro rollo. En España depende mucho de la ciudad, tiene otro nivel de exigencia. Aquí está mucho más de moda la moda, el rollo que llevas... Allí da igual. Hemos dado conciertos en polideportivos enormes en los que no nos conocía nadie y han estado todo el concierto chillando, aplaudiendo, siguiéndonos el rollo.
(Mon) Salíamos del hotel con escolta policial.
(Jaime) Y lo mejor de todo es que no sabían quiénes éramos.
(Mon) Sólo por el hecho de ser españoles nos pedían autógrafos.
(Jaime) Ese feedback no es muy real, pero no deja de ser agradecido. En España, tú sales a tocar ante desconocidos y el público está a la expectativa de "bueno, a ver qué hacen estos, que seguro que son una mierda". Como experiencia, es brutal.
(Beris) Además, siempre lo decimos. La gente que cruza el charco suele ser artistas consagrados, grupos que tienen un nombre aquí. Lo nuestro es un poco raro. Allí vives un espejismo, un paréntesis. Hemos estado currando durante tres años, viendo como nadie te hace caso, intentando sacar el grupo adelante cuando nadie confía en ti y, cuando ves estas cosas, te las tomas de otra forma, porque no te las crees.
(Mon) Salvo en Chile que sí que sonó el disco y sí nos conocían. Ahí podía tener un poco más de lógica. En Buenos Aires pudimos tocar en el Luna Park, que es impresionante.
(Beris) Pereza está intentando hacer cosas en Argentina y les está costando muchísimo. Sacar un artista de la nada en un país extranjero es muy difícil.
¿Vosotros habéis terminado de explotar?
(Jaime) Por Dios, que no lo hayamos hecho. Siendo realistas, no tenemos un disco debut con el que nos haya conocido todo el mundo.
(Mon) Hay un hándicap evidente y es que no tenemos un disco físico. No puedes encontrar nuestro disco en una tienda. En nuestro baremo y dentro de nuestras posibilidades, estamos muy contentos del resultado.
(Jaime) Para empezar, creo que nuestras canciones no son las que hacen muchos grupos que suenan en 40. El burdel llegó no a un público más exquisito, que tampoco hay que fliparse, pero tampoco muy comercial. No creo que una niña de 14 años que haya escuchado El burdel haya dicho: "Guau-en falsete-, me vuelvo loca". Que a lo mejor alguna sí, pero hasta cierto punto preferimos que no haya sido así. Si explotas con un único tema, luego te desinflas.
(Mon) Queremos ir despacio, creemos que hemos hecho un disco de puta madre, con canciones que pasaron una criba muy dura. Se hizo a conciencia, bien elegido y lo que nos queda ahora es promocionar este tercer single y después sacar un segundo disco y confirmar toda esta historia, que aquellos que no nos hayan visto digan "pues estos tíos son interesantes". La clave de cualquier grupo está en sus segundos y terceros discos.
(Jaime) Creo que, además, somos un grupo difícil de localizar. Hemos sacado tres sencillos: en el primero, cantábamos los tres el estribillo y cada uno, unas estrofas; el segundo lo canto yo y el tercero lo canta Mon.
Respecto a lo que decías Mon sobre los segundos y terceros discos, leí el otro día una entrevista a Ramoncín en Efe Eme en la que decía una cosa que me parece interesante: el gran problema de muchos músicos en este país es, precisamente, querer demostrar muy rápido en un segundo o un tercer disco lo mucho que han aprendido, lo mucho que han evolucionado, en lugar de seguir su instinto.
(Beris) Es que hemos visto cómo funciona esto desde dentro. Cuando nosotros empezamos y nos proponían cosas muy alucinantes sin merecerlo, o no salían o lo que salía, no era real. Hay que ir poco a poco, tocar en todos los sitios. Para mí lo más importante es que, cada vez que hemos tocado en directo, creo que hemos conectado con la gente y ese es nuestro mejor activo.
(Jaime) En directo, nos definimos más. Respecto a lo que decías de Ramoncín, es que creo que España es un país un poco extraño para la música en comparación con otros. Hoy, o haces un disco con música comercial aposta... Si escuchas el primer disco de Melendi, no es tan comercial como lo que está haciendo ahora... Eso. O vas a saco a lo comercial o te vas al rollo indie a saco. No hay nada en medio, sólo dos vertientes muy separadas. No hay radio en medio, no hay conciertos en medio, no hay público en medio para nada de eso.
Pero vosotros también encajáis en la vertiente más independiente. Estábais por la Gala de los Guilles, como candidatos.
(Beris) Ese es el mejor premio al que podemos estar nominados: el que valora el trabajo realizado por Madrid. Un curro de ratones sin parar.
(Jaime) Premiar a alguien por su directo es algo más físico, más tangible.
¿Hay muchas salas en las que no hayáis tocado en Madrid?
(Beris) No hay muchas, pero hay algunas en las que todavía no hemos actuado. El Sol viene ahora, es la que más nos apetece, hemos estado ahí pagando por ver a muchos buenos grupos, pero no hemos actuado nosotros.
(Mon, que retoma ahora el tema de Ramoncín) En España hay una sensación de inmediatez, de que salga algo y tenga que ser bueno ya que no me gusta. Nosotros no hemos tenido mucha prisa, creemos en lo que hacemos y en seguir mejorando, por supuesto.
(Jaime) E insisto, en conseguir un público fiel.
¿Lo váis teniendo?
(Beris) En Madrid, sí. En Alicante, Murcia...
(Jaime) A la gente que nos ve en directo le apetece ver otro, porque lo que somos de verdad se ve en concierto. Mola que un año seamos veinte en la sala y al siguiente seamos cuarenta. Para conseguir eso, sólo se necesita tiempo.
(Beris) Lo bueno que tiene 84 es que ves a gente con ganas tocando sobre el escenario. He visto a artistas a los que admiro mucho sonar como una orquesta en salas importantes. No ver nada de actitud.
¿Os ha dado muchas hostias el azar?
(Mon) Nos cae muy mal el azar.
(Jaime) Por suerte o por desgracia, cuando estábamos recién juntaditos, te hablo de los tres primeros meses en lo que había cero participación, uno tocaba su tema, luego el otro y después el otro, caímos en manos de un AR que nos llevó hasta Alejo Stivel, nos prometió el oro y el moro. Y ese oro y el moro duró tres años... infernales.
(Beris) Querían que firmáramos contratos con 21 años sin tener ni idea de lo que era una cláusula, sin saber qué significa tu firma.
(Jaime) Eso nos ha hecho tener que pagar el doble para reparar los errores de esas promesas que no llevan a ninguna parte. "Tu disco sale en dos meses". Nos íbamos encantados de allí, pasaban los dos meses y nada, mucho contrato fingido sobre la mesa.
(Mon) Hemos rechazado contratos de nueve años de duración.
(Beris) Pero es que es lo que hay por ahí.
(Jaime) Cambios de presidentes de compañías por todos los lados.
(Beris) Y tú mientras, trabajando en curros de mierda para poder sacar esto adelante, justificar delante de tus padres, de toda tu gente que eso es verdad, que no es un capricho, que crees en lo que estás haciendo.
(Jaime) Yo me fui tres meses a vivir fuera porque si no, hubiera dejado la música. El problema de este mundo es que te hace parecer vago, pero no es así. Lo que pasa es que no recoges los frutos de un tío que está sentado delante del ordenador en una oficina.
¿El sello se ha portado con vosotros?
(Beris) Sí, en eso hay que ser sincero. Igual que te decimos todas estas maravillas de algunas compañías, con el sello hemos hecho más de noventa conciertos. Espectacular, no nos lo esperábamos.
Tengo curiosidad en algo. Dentro de un rato salís a una sala con doscientas personas de aforo del extrarradio de Madrid. Pero como os planteáis esto cuando en una gira tan pronto estáis tocando para 20 personas, 400, 1.000 o 5.000.
(Mon) Tanto con Los Secretos como hoy aquí lo mejor es ser natural. El gancho es que quien te vea sepa que te lo estás pasando bien.
(Jaime) Creemos que el concierto es un show, mezcla canciones y también el parloteo, que hay que currárselo
Si preferis verlo en la pagina directamente, podeis accerder a través de este enlace:
http://www.musicaen1000direcciones.com/index.php/entrevistas-actualidad/375-84-entrevista-massai-cafe-villalba-madrid-2010?start=1
La cita es en el Massai Café de Collado Villalba (Madrid), a eso de las siete de la tarde, horas antes de su concierto en la misma sala. Allí está Álex, su responsable de comunicación, esperando al grupo que llega con un breve retraso. Les espera una buena noticia: se van a Chile dentro de un especial benéfico que se organiza con motivo del terremoto. El motivo no es halagueño, pero para ellos es una oportunidad y chocan la mano, también conmigo, aunque hace veinte segundos que me acabo de presentar. "¿A qué hora es el concierto?", pregunta Jaime. Es a las 23 h. "Hostia, y ¿qué hacemos hasta entonces? Vamos a pillarnos una buena moña...".
Anécdotas aparte, nos llama la atención 84. No tienen disco físico. Su colección de canciones sólo está disponible en la red y de ellas podemos decir que son una buena muestra de lo que pueden llegar a ser en unos años. Tienen actitud y referencias evidentes por las que pueden ser metidos en "el saco de...", pero también un buen directo que ofrecer y una propuesta aparentemente sincera. Aquí lo mejor de la charla que tuvimos con ellos antes de su prueba de sonido.
Desde que terminárais 'El burdel de las sirenas' ha pasado bastante tiempo, ¿lo seguís viendo de la misma forma ahora?
(Jaime) En realidad, es raro. En diciembre de 2008 salió un mini EP de tres canciones y el disco lo dejamos para principios de junio de 2009. En verdad, tiene poco más de medio año, pero estos doce meses han sido increíbles. Para ser un primer disco, nos han ido muy bien las cosas: ha tenido un buen recibimiento y se está conociendo más ahora, pasado el tiempo. Normalmente, en cualquier compañía sacas un disco, te promocionan el primer single y como no vaya bien: ¡hasta luego, Javier! Vamos ya por el tercer sencillo y estamos encantados, hay que seguir aprovechándolo.
¿Y la calidad del disco? Las canciones llevan compuestas desde hace más de tres años.
(Beris) Incluso hay alguna de antes. Hay muchas canciones que las hicimos siendo más adolescentes, con más inocencia y tienen una frescura especial. Con el sonido, tuvimos mucha suerte al dar con Josu García, Fernando Polaino y Alejo Stivel, que han respetado la idea que teníamos de respetar el formato acústico, que se viesen muy claras las voces, las canciones. Viendo este primer disco, tenemos más claro por donde queremos ir con 84.
(Jaime) Si grabásemos ahora nuestro segundo disco, tendría muchas diferencias con el primero.
¿Tenéis mucho material acumulado?
(Jaime) Sí.
(Beris) Demasiado, excesivo... (risas). Tenemos entre cuarenta y cincuenta canciones.
(Mon) Es que grabamos el disco en 2007 y, hasta que firmamos con el Sello Movistar, los que nos dieron la oportunidad, pasó mucho tiempo... un par de años. En esos dos años, aparte de tocar mucho por Madrid, nos dedicamos a componer como animales. Si a esto le añades este año y medio de viajes y experiencias, nos hemos visto con un montón de canciones que ya veremos que hacemos con ellas. Si alguien quiere alguna, que nos llame y se la vendemos (risas).
¿Haces algún tema de los inéditos en vuestros conciertos actuales?
(Beris) Hay alguno, pero lo que tenemos más o menos cuadrado, lo más nuevo nos lo guardamos. Cuando salió el primer disco, lo que pasó es que para la gente que nos seguía no supuso ninguna novedad, porque ya se sabían todos los temas.
(Jaime) Incluso para nosotros. No es lo mismo sacar un disco de temas que llevas tocando cuatro años, a canciones que aún no han visto la luz en directo. Las estás empezando a tocar, las ves de otra manera.
(Mon) También es una cuestión de completar el repertorio. Si haces un bolo conjunto, no hay problema, pero, si el concierto es sólo tuyo, no puedes ofrecer sólo 40 minutos de bolo. Si vamos en acústico, hacemos lo que nos apetece... ahí no dependes de ellos, ni de un ensayo previo.
¿De donde viene el interés por el concepto acústico?
Viene de siempre. Empezamos así, éramos tres colegas que se reunían a tocar canciones con su acústica. Nos llamaban de un bar e íbamos los tres, cada uno con su guitarra. Luego le dimos forma al tema armonías basándonos en música que nos gustaba mucho y en grupos de los sesenta, setenta: Crosby Still and Nash, por ejemplo.
Tenéis una lista de artistas con los que habéis compartido cartel muy dispar. ¿La filosofía es tocar donde se pueda? ¿Y no hay más?
(Jaime) Exactamente. En el momento en el que estamos, o aprovechas las oportunidades o estás perdido. No puedes ir de auténtico en el momento en el que estamos. "No, no, yo no voy a tocar con no se quién"..., eso no lo puedes hacer.
Totalmente de acuerdo, pero ¿reconoces que hay grupos con los que tenéis muy poco que ver?
(Beris) ¿Sabes lo que pasa? Que, a veces, te invitan a tocar con alguien, que, a priori, te da repelús, un poco de grima (risas). Pero luego, cuando estás con ese artista de gira, te das cuenta de que también tiene su historia. Te ayuda a descubrir un directo suyo por dentro, lo estás compartiendo con él.
Ponme un ejemplo.
(Jaime) Estás buscando polémica (risas).
(Beris) No, te lo digo sin ningún problema. Tocamos con Amaia Montero, que, a priori, no era lo que más nos motivaba... pero tenía una banda cojonuda. Tocaba Javi Pereira, Charlie, batería de Quique González, e Iván Ferreiro.
(Mon) Eran musicazos. Entre América y España estuvimos dos o tres meses con ellos yendo y viniendo a todos lados. Sí, tú ves un video de Amaia Montero y el target es evidentemente distinto. Soy el primero que no me compraría un disco de ella, pero ves un directo suyo y las cosas cambian.
(Jaime) Además te das cuenta de por qué están donde está, porque es una currante. Nosotros nos levantamos un día en un hotel de no se qué ciudad, tranquilamente, mientras que Amaia Montero llevaba desde las ocho de la mañana haciendo entrevistas en las teles y radios de todos lados, sin parar.
Supongo que, si tuviérais la oportunidad de hacerlo vosotros, también lo hubierais hecho.
(Beris) Por supuesto, pero por lo que nos cuentan, hay muchos artistas que ya no lo hacen. Gente que ha llegado a un punto en el que se lo pueden tomar de otra manera y elegir qué hacer. También podemos decir que hemos tocado con gente espectacular que jamás imaginamos.
(Mon) La gira de seis ciudades con Pereza fue muy buena. Nos quedamos con la misma sensación que te decía antes. Son unos profesionales. Hemos grabado un tema con Los Secretos también.
(Beris) En el fondo, hemos elegido por donde ir en cada momento. Cuando empiezas, la gente te intenta colocar, etiquetarte para quedarse un poco tranquilo, lo hacemos todos, sobre todo para saber el palo del que vas. Y nuestro palo es tocar en directo, no nos gusta hacer playback. Hemos pedido una colaboración y, en vez de pedirla con el cantante de turno de serie famosa, nos la hemos currado por nuestra cuenta pidiéndosela a Ramón Arroyo para saber si les parecía bien. Sí, aceptas cosas que en principio no te hacen mucha gracia, pero la decisión la tomas tú y tú mismo te vas colocando donde de verdad quieres.
¿Cómo vino lo de Ramón Arroyo?
(Mon) Tenemos muchos amigos en común, Ramón ha venido a algunos conciertos nuestros, le gusta la banda. El es amante de los grupos que hacíamos referencia antes. Un día nos grabamos Esperando una señal y vimos que tenía un rollo súper Secretos. Se lo propusimos sin ningún compromiso y aceptó de inmediato.
(Beris) Y tocamos con ellos en el Palacio de deportes con tres guitarras acústicas. No te imaginas el silencio que había, era espectacular (risas).
¿Qué tal la experiencia en lugares como Perú o Ecuador?
(Jaime) Espectacular, es que el público no tiene nada que ver con el español, es otro rollo. En España depende mucho de la ciudad, tiene otro nivel de exigencia. Aquí está mucho más de moda la moda, el rollo que llevas... Allí da igual. Hemos dado conciertos en polideportivos enormes en los que no nos conocía nadie y han estado todo el concierto chillando, aplaudiendo, siguiéndonos el rollo.
(Mon) Salíamos del hotel con escolta policial.
(Jaime) Y lo mejor de todo es que no sabían quiénes éramos.
(Mon) Sólo por el hecho de ser españoles nos pedían autógrafos.
(Jaime) Ese feedback no es muy real, pero no deja de ser agradecido. En España, tú sales a tocar ante desconocidos y el público está a la expectativa de "bueno, a ver qué hacen estos, que seguro que son una mierda". Como experiencia, es brutal.
(Beris) Además, siempre lo decimos. La gente que cruza el charco suele ser artistas consagrados, grupos que tienen un nombre aquí. Lo nuestro es un poco raro. Allí vives un espejismo, un paréntesis. Hemos estado currando durante tres años, viendo como nadie te hace caso, intentando sacar el grupo adelante cuando nadie confía en ti y, cuando ves estas cosas, te las tomas de otra forma, porque no te las crees.
(Mon) Salvo en Chile que sí que sonó el disco y sí nos conocían. Ahí podía tener un poco más de lógica. En Buenos Aires pudimos tocar en el Luna Park, que es impresionante.
(Beris) Pereza está intentando hacer cosas en Argentina y les está costando muchísimo. Sacar un artista de la nada en un país extranjero es muy difícil.
¿Vosotros habéis terminado de explotar?
(Jaime) Por Dios, que no lo hayamos hecho. Siendo realistas, no tenemos un disco debut con el que nos haya conocido todo el mundo.
(Mon) Hay un hándicap evidente y es que no tenemos un disco físico. No puedes encontrar nuestro disco en una tienda. En nuestro baremo y dentro de nuestras posibilidades, estamos muy contentos del resultado.
(Jaime) Para empezar, creo que nuestras canciones no son las que hacen muchos grupos que suenan en 40. El burdel llegó no a un público más exquisito, que tampoco hay que fliparse, pero tampoco muy comercial. No creo que una niña de 14 años que haya escuchado El burdel haya dicho: "Guau-en falsete-, me vuelvo loca". Que a lo mejor alguna sí, pero hasta cierto punto preferimos que no haya sido así. Si explotas con un único tema, luego te desinflas.
(Mon) Queremos ir despacio, creemos que hemos hecho un disco de puta madre, con canciones que pasaron una criba muy dura. Se hizo a conciencia, bien elegido y lo que nos queda ahora es promocionar este tercer single y después sacar un segundo disco y confirmar toda esta historia, que aquellos que no nos hayan visto digan "pues estos tíos son interesantes". La clave de cualquier grupo está en sus segundos y terceros discos.
(Jaime) Creo que, además, somos un grupo difícil de localizar. Hemos sacado tres sencillos: en el primero, cantábamos los tres el estribillo y cada uno, unas estrofas; el segundo lo canto yo y el tercero lo canta Mon.
Respecto a lo que decías Mon sobre los segundos y terceros discos, leí el otro día una entrevista a Ramoncín en Efe Eme en la que decía una cosa que me parece interesante: el gran problema de muchos músicos en este país es, precisamente, querer demostrar muy rápido en un segundo o un tercer disco lo mucho que han aprendido, lo mucho que han evolucionado, en lugar de seguir su instinto.
(Beris) Es que hemos visto cómo funciona esto desde dentro. Cuando nosotros empezamos y nos proponían cosas muy alucinantes sin merecerlo, o no salían o lo que salía, no era real. Hay que ir poco a poco, tocar en todos los sitios. Para mí lo más importante es que, cada vez que hemos tocado en directo, creo que hemos conectado con la gente y ese es nuestro mejor activo.
(Jaime) En directo, nos definimos más. Respecto a lo que decías de Ramoncín, es que creo que España es un país un poco extraño para la música en comparación con otros. Hoy, o haces un disco con música comercial aposta... Si escuchas el primer disco de Melendi, no es tan comercial como lo que está haciendo ahora... Eso. O vas a saco a lo comercial o te vas al rollo indie a saco. No hay nada en medio, sólo dos vertientes muy separadas. No hay radio en medio, no hay conciertos en medio, no hay público en medio para nada de eso.
Pero vosotros también encajáis en la vertiente más independiente. Estábais por la Gala de los Guilles, como candidatos.
(Beris) Ese es el mejor premio al que podemos estar nominados: el que valora el trabajo realizado por Madrid. Un curro de ratones sin parar.
(Jaime) Premiar a alguien por su directo es algo más físico, más tangible.
¿Hay muchas salas en las que no hayáis tocado en Madrid?
(Beris) No hay muchas, pero hay algunas en las que todavía no hemos actuado. El Sol viene ahora, es la que más nos apetece, hemos estado ahí pagando por ver a muchos buenos grupos, pero no hemos actuado nosotros.
(Mon, que retoma ahora el tema de Ramoncín) En España hay una sensación de inmediatez, de que salga algo y tenga que ser bueno ya que no me gusta. Nosotros no hemos tenido mucha prisa, creemos en lo que hacemos y en seguir mejorando, por supuesto.
(Jaime) E insisto, en conseguir un público fiel.
¿Lo váis teniendo?
(Beris) En Madrid, sí. En Alicante, Murcia...
(Jaime) A la gente que nos ve en directo le apetece ver otro, porque lo que somos de verdad se ve en concierto. Mola que un año seamos veinte en la sala y al siguiente seamos cuarenta. Para conseguir eso, sólo se necesita tiempo.
(Beris) Lo bueno que tiene 84 es que ves a gente con ganas tocando sobre el escenario. He visto a artistas a los que admiro mucho sonar como una orquesta en salas importantes. No ver nada de actitud.
¿Os ha dado muchas hostias el azar?
(Mon) Nos cae muy mal el azar.
(Jaime) Por suerte o por desgracia, cuando estábamos recién juntaditos, te hablo de los tres primeros meses en lo que había cero participación, uno tocaba su tema, luego el otro y después el otro, caímos en manos de un AR que nos llevó hasta Alejo Stivel, nos prometió el oro y el moro. Y ese oro y el moro duró tres años... infernales.
(Beris) Querían que firmáramos contratos con 21 años sin tener ni idea de lo que era una cláusula, sin saber qué significa tu firma.
(Jaime) Eso nos ha hecho tener que pagar el doble para reparar los errores de esas promesas que no llevan a ninguna parte. "Tu disco sale en dos meses". Nos íbamos encantados de allí, pasaban los dos meses y nada, mucho contrato fingido sobre la mesa.
(Mon) Hemos rechazado contratos de nueve años de duración.
(Beris) Pero es que es lo que hay por ahí.
(Jaime) Cambios de presidentes de compañías por todos los lados.
(Beris) Y tú mientras, trabajando en curros de mierda para poder sacar esto adelante, justificar delante de tus padres, de toda tu gente que eso es verdad, que no es un capricho, que crees en lo que estás haciendo.
(Jaime) Yo me fui tres meses a vivir fuera porque si no, hubiera dejado la música. El problema de este mundo es que te hace parecer vago, pero no es así. Lo que pasa es que no recoges los frutos de un tío que está sentado delante del ordenador en una oficina.
¿El sello se ha portado con vosotros?
(Beris) Sí, en eso hay que ser sincero. Igual que te decimos todas estas maravillas de algunas compañías, con el sello hemos hecho más de noventa conciertos. Espectacular, no nos lo esperábamos.
Tengo curiosidad en algo. Dentro de un rato salís a una sala con doscientas personas de aforo del extrarradio de Madrid. Pero como os planteáis esto cuando en una gira tan pronto estáis tocando para 20 personas, 400, 1.000 o 5.000.
(Mon) Tanto con Los Secretos como hoy aquí lo mejor es ser natural. El gancho es que quien te vea sepa que te lo estás pasando bien.
(Jaime) Creemos que el concierto es un show, mezcla canciones y también el parloteo, que hay que currárselo
Si preferis verlo en la pagina directamente, podeis accerder a través de este enlace:
http://www.musicaen1000direcciones.com/index.php/entrevistas-actualidad/375-84-entrevista-massai-cafe-villalba-madrid-2010?start=1
Re: Entrevista a 84 en: http://www.musicaen1000direcciones.com/
la proxima vez que me meta lo leo que no me da tiempo ahora jajajaja
Re: Entrevista a 84 en: http://www.musicaen1000direcciones.com/
ya te digo es larguisimo!! jaja lei en dos rondas.. xD
Re: Entrevista a 84 en: http://www.musicaen1000direcciones.com/
jejejeje es larga pero la verdad que esta uy bien
Gracias por subirla Sonia
Gracias por subirla Sonia
montse- Fan 1
- Cantidad de envíos : 158
Fecha de inscripción : 04/10/2009
Re: Entrevista a 84 en: http://www.musicaen1000direcciones.com/
Que buena entrevista!! no como esas que siempre les preguntan lo mismo..jejeje
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